Reutilizar las cosas (mal visto???)
Viví durante casi tres años en Málaga…
Me encanta Andalucía!!!
A veces recuerdo que me gustaba tanto de allí, no eran las largas jornadas de playa, el poder ir de abril a octubre, las tardes al sol tomando tu tintito de verano (el mío con limón por favor), tampoco esa luz tan especial y cegadora… la brisa por la noche después de un día de calor tumbada en el sofá, con las ventanas abiertas y siento el frescor en tu cuerpo, uf que gusto… caminar por el paseo de Huelín, el mercadillo del sábado por la mañana, los chiriguitos de la playa de los álamos por la noche tomando algo en la arena charlando con el rumor del agua y la música, sus pueblos blancos, los pinsapos, la serranía de las nieves, dar una vuelta por Marbella y ver los yates y los cochazos que hay por allí (o al menos había)…
No, todo eso la hacen única y maravillosa y llenaban mi poco tiempo libre…
Pero, lo que de verdad me gustaba de Málaga, y confieso que no me atrevo a escribir, es recoger cosas de los contenedores…
Quizá porque la gente del norte es más recatada a la hora de consumir (cosa que dudo), quizá que en muchas ciudades ya no existen contenedores (verdaderamente para mí sería un problema, jejee) pero el consumismo tan exagerado que tenemos hoy en día (y probablemente nos haya llevado a esta crisis…) a mi me servía para recoger cosas y reutilizarlas… no es que fuera de contenedor en contenedor, es que ya me había hecho a observarlos y sabía cuando había algo estupendo que reciclar en alguno de ellos, ya había desarrollado un sentido de contenedor, jejee. Así he ido haciendo un "ajuar" precioso, verdaderamente no se si me da pena o alegría pensar todas las cosas que se pueden encontrar en la basura…
Y la emoción que sientes cuando las encuentras…. superior a las rebajas.
La gente lo tira todo para volver a comprar cosas nuevas que tal vez en poco tiempo vuelvan a tirar…
Así que mientras otros iban de shoping al Corte Inglés, yo iba de contenedores a ver que me apañaba, jejeee J
Me encanta Andalucía!!!
A veces recuerdo que me gustaba tanto de allí, no eran las largas jornadas de playa, el poder ir de abril a octubre, las tardes al sol tomando tu tintito de verano (el mío con limón por favor), tampoco esa luz tan especial y cegadora… la brisa por la noche después de un día de calor tumbada en el sofá, con las ventanas abiertas y siento el frescor en tu cuerpo, uf que gusto… caminar por el paseo de Huelín, el mercadillo del sábado por la mañana, los chiriguitos de la playa de los álamos por la noche tomando algo en la arena charlando con el rumor del agua y la música, sus pueblos blancos, los pinsapos, la serranía de las nieves, dar una vuelta por Marbella y ver los yates y los cochazos que hay por allí (o al menos había)…
No, todo eso la hacen única y maravillosa y llenaban mi poco tiempo libre…
Pero, lo que de verdad me gustaba de Málaga, y confieso que no me atrevo a escribir, es recoger cosas de los contenedores…
Quizá porque la gente del norte es más recatada a la hora de consumir (cosa que dudo), quizá que en muchas ciudades ya no existen contenedores (verdaderamente para mí sería un problema, jejee) pero el consumismo tan exagerado que tenemos hoy en día (y probablemente nos haya llevado a esta crisis…) a mi me servía para recoger cosas y reutilizarlas… no es que fuera de contenedor en contenedor, es que ya me había hecho a observarlos y sabía cuando había algo estupendo que reciclar en alguno de ellos, ya había desarrollado un sentido de contenedor, jejee. Así he ido haciendo un "ajuar" precioso, verdaderamente no se si me da pena o alegría pensar todas las cosas que se pueden encontrar en la basura…
Y la emoción que sientes cuando las encuentras…. superior a las rebajas.
La gente lo tira todo para volver a comprar cosas nuevas que tal vez en poco tiempo vuelvan a tirar…
Así que mientras otros iban de shoping al Corte Inglés, yo iba de contenedores a ver que me apañaba, jejeee J
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